Rescatamos las líneas puras, la búsqueda de equilibrio y la armonía estética. Volvemos al “menos es más” de Mies Van der Rohe, a los colores neutros y a los formatos tradicionales.
El retorno a la sencillez
“La originalidad consiste en el retorno al origen; así pues, original es aquello que vuelve a la simplicidad de las primeras soluciones”. Antonio Gaudí ya nos anunciaba que la creatividad significa en muchas ocasiones volver al pasado y retornar a la sencillez y ¡no hay duda! ¡Las formas esenciales están más de moda que nunca! Vuelve la simplicidad y las líneas más puras de la geometría.
Desde Hisbalit hemos viajado por la historia de la arquitectura, descubriendo una forma estética y funcional que permanece en el tiempo: el rectángulo, nuestro nuevo formato. Una mezcla de lo estático y lo dinámico, de la tradición con la modernidad. Líneas minimalistas que nos alejan de los elementos que nos saturan, y que nos transmiten sencillez, armonía y funcionalidad.
Arquitectura & Rectángulo
El rectángulo siempre ha despertado pasiones. Desde la arquitectura más clásica, en la que griegos y romanos partían de módulos cuadrados para lograr rectángulos estáticos, que configuraban sus templos y trazados urbanos, hasta evolucionar a la sección áurea en búsqueda de la divina razón de la belleza.
En la arquitectura moderna, la escuela Bauhaus experimentó con el Doppelquadrat para buscar la estética funcional, donde las líneas rectas y la geometría más pura confluían. Le Corbusier, retomó el ideal antiguo de relacionar directamente las proporciones de los edificios con las del hombre. Su sistema de medida, llamado Modulor, encontró una relación matemática entre el hombre y la arquitectura, tomando como punto de partida la superposición de un rectángulo áureo con el rectángulo doble cuadrado.
En la arquitectura oriental, el rectángulo también ha sido uno de los formatos esenciales. En sus casas, el rectangular modelo Ken de los tatamis japoneses define las dimensiones de los hogares.
Geometría y proporción
“La geometría solucionará los problemas de la arquitectura”. Inspirado en los postulados de Le Corbusier, el rectángulo DOPPEL, nuestro nuevo formato, invita a jugar con la geometría a través de la perfección de un rectángulo “doble cuadrado”.
Dos cuadrados se fusionan para jugar con la estética, la simbología y la creatividad. Sus líneas puras y proporciones exactas 1:2 transmiten orden y equilibrio, y su sencillez otorga seguridad y firmeza a los espacios.
El rectángulo “doble cuadrado” es un formato modular. Permite jugar con el movimiento según la orientación en la que se utilice, creando efectos ópticos únicos. En horizontal para transmitir sensación de reposo o en vertical para lograr dinamismo y movimiento. También es posible mezclar las orientaciones consiguiendo un sorprendente “efecto trenzado”.
Tonos que conectan
El rectángulo DOPPEL adquiere toda su esencia vestido de colores neutros, que tienen como hilo conductor la conexión con la naturaleza y las influencias tradicionales. Tonos suaves en acabado mate que reproducen el aspecto de las rocas, colores atemporales que no pasan de moda: blancos, grises, azules y marrones.
Colores elegantes y tonos piedra invitan a llenar los espacios de calidez, reposo y calma.
Personalidad y contraste
El gris oscuro (DOPPEL 564) consigue crear atmósferas llenas de elegancia. Perfecto para escenarios formales y de equilibrio. Lejos de ser atrevido, es el tono de la armonía y la unidad en el espacio.
Pureza y frescura
El blanco mate (DOOPEL 568) es el tono de la pureza, de los espacios frescos y relajantes. El color perfecto para fusionar con madera, elementos vegetales y mobiliario en tonos cálidos.
Armonía y calma
El gris azulado (DOPPEL 569) nos envuelve en un ambiente del lujo y elegancia fusionado con la calma y armonía. El tono del verdadero equilibrio.
Serenidad y sofisticación
Nos sumergimos en el tono de la serenidad, el gris claro (DOPPEL 570). Admite un sinfín de combinaciones cromáticas. Blanco, colores tierra, azul, rojo…
Energía
Atrevido y sofisticado. El azul intenso (DOPPEL 573) aporta energía y mucho carácter en decoración.Un tono que atrapa y nos conecta con el agua.
El sello más natural
El color de la calidez, el marrón oscuro (DOPPEL 574) nos transporta a la naturaleza a través de la madera y aporta seguridad a los espacios.